Retrato realizado por Javier Torregrosa. Experto en Comunicación No Verbal Científica y Morfopsicología
La cara es el reflejo del alma
A través del visionado de distintas fotografías de frente y también de perfil de Donald Trump, vamos a realizar un análisis de su psicología. Trataremos de observar cual es la parte de su cerebro preferente y que tiene más peso para él. Para ello iremos analizando punto por punto su rostro conforme el protocolo propuesto para finalmente emitir un perfil personal.
Iremos de lo más general a lo particular, entrando en más detalle cada vez que avanzamos en el análisis.
GENERALIDADES
En primer lugar analizamos los movimientos de base del rostro o lo que es lo mismo, del cerebro de Donald Trump. Entramos pues a ello;
Lo primero que observo es que Donald Trump es una persona con gran capacidad de trabajo, además es un corredor de fondo, capaz de aguantar muchas horas trabajando así como una gran resistencia a las críticas y a golpes que le hubiera podido dar la vida tanto en pasado como en presente y posiblemente futuro. Gran capacidad de combatividad. No es demasiado sensible en general, esto es lo que le hace ser duro antes las inclemencias que le pudieran sobrevenir. Esto se puede deducir al observar el marco dilatado de su rostro.
Hombre de energía, de acción, e impulsivo en sus acciones (MARCO EN GENERAL EN RETRACCIÓN LATERAL Y RECEPTORES EN RETRACCIÓN LATERAL*). No es excesivamente perfeccionista sino que su MARCO DILATADO Y SU RETRACCIÓN FRONTAL nos indica en general todo lo contrario. *La retracción lateral es su cara en avance, o sea con inclinación, hacia fuera.
Su gran pasión interior se desarrolla en términos materiales de la vida y los que son realizables, mucho más que los asuntos intelectuales. Ello nos indica que sus gustos son las posesiones, el poder, el dinero, lo relacionado con lo material, y también valora la comida o el sexo por encima de la media, (ZONA EN EXPANSIÓN INSTINTIVA- REPTILIANA), esto le genera además una gran combatividad, pocas veces superado por otras personas, capaz de mantenerse firme con una capacidad de lucha y aguante por encima de lo que a veces podríamos entender como normal. El cerebro instintivo, es el reptiliano, es el que nos ha procurado la supervivencia a lo largo de los siglos.
A pesar de ser una persona decidida y de acción, así como de gran combatividad, esta acción se traslada sobre todo en forma de órdenes a otros terceros para que ellos ejerzan la acción requerida (ATONÍA), presenta atonía en sus carnes en la zona de la papada. Esta cuestión lo hace algo más perezoso, ralentizando un poco su impulso, sobre todo a nivel instintivo, cuestión que le viene muy bien puesto que al ser un retraído lateral total, tiene demasiado impulso y poca maduración de ideas. Lo que piensa lo dice. Esta atonía en su zona instintiva no le hace menos instintivo y materialista sino todo lo contrario pero la pereza que antes comentaba le hace ser una persona que dirige y ordena a sus subordinados para conseguir sus propósitos.
(SU MODELADO PLANO con ciertas abolladuras) nos indica una vez más su gran combatividad, y desacuerdo con las normas establecidas, otro aspecto en su lectura es que no podemos definir a Trump como una persona suave ni fácil, sino todo lo contrario, y con cierta susceptibilidad. Las abolladuras aún le dan más impulso, energía y tensión.
ENTRAMOS EN DETALLE
Su frente nos indica que a nivel intelectual no es una persona generalista pero sí más centrada en el detalle, su mente está más preparada para menos cuestiones y con más profundidad de especialización. Me permito hacer una reflexión,… “Trump debería rodearse de “muchos” especialistas y también de algún estratega dado que él no tiene una visión ni capacidad de conjunto tan amplia como la que cabría esperar de un presidente de los estados Unidos”. Posiblemente para un área concreta y determinada sería mejor profesional. La frente a la par también nos indica rapidez de ideas, más que rapidez, súper-rapidez al ser una frente retraída lateral (frente inclinada) y además siendo corta. También podemos ver que Trump es un ser impulsivo, lo que piensa lo dice, pocas veces se muerde la lengua.
Su frente no es redonda, sino plana. Esta cuestión nos indica que posee una mente poco influenciable, de ideas propias, combativa, no todo le vale e intelectualmente no es una persona de mente abierta, aunque claro, esta cuestión está clara con lo que ya sabemos de él por sus intervenciones públicas y no haría falta saber de Psicología del rostro. Su frente es corta, tiene poca altura, lo que nos hace presenciar a un personaje con menos capacidad que otras personas para entender ciertos aspectos.
Cuando nos fijamos en sus pómulos, vemos que no son pequeños. Él siente, y parte de sus acciones las acomete emocionalmente aunque este cerebro, el emocional, fijándonos en él parece que pesase menos que su parte más instintiva. Por último, no mermada, pero sí menos importante que las otras dos nos aparece el intelectual, por lo que no podríamos definir a Trump como un intelectual.
Al decir que la cara es el reflejo del alma, también nos referimos a que la cara es el reflejo del cerebro, probablemente a través de sus 12 pares de nervios craneales que nacen en el encéfalo y terminan en las distintas partes de la cara, podemos observar los receptores de Donald, sus ojos, su nariz y su boca, que nos da una amplia y precisa información de su comportamiento y de su manera de pensar.
La mayor parte se sus abolladuras, aunque no son profundas, las podemos situar en la zona de los pómulos (zona emocional), en el masetero y mandíbula (zona reptiliana o también llamada instintiva), lo que le hacen ser una persona con un nivel de energía y ebullición en estas cuestiones, las emocionales y las instintivas, aunque recordamos que la instintiva a pesar de ser muy potente, la acción de hacer las cosas por él mismo se ve parcialmente ralentizada por la pereza que le confiere su papada, con lo que su pasión por la comida, poder, sexo y dinero le hace tener personas que se lo procuran.
Y la altura de sus tres zonas, ¿cómo son? La zona más alta de su cara es la que podríamos medir desde el mentón a la base de la nariz, esta zona es la instintiva, tiene a la par de mayor anchura, también mayor altura, es la que cubica más, y le confiere mayor capacidad de manejo de los temas relacionados con su zona instintiva como es la protección, comida, sexo, etc. Pero sus zonas cognitiva y emocional son menos altas, son más cortas, lo que le hará más impulsivo en estas áreas.
Hablamos de sus receptores, que nos confieren la forma y manera en la que transmitimos y recibimos la información intelectual, emocional o primaria-instintiva, además nos dicen cómo nos comportamos, cuál es el primer impulso que tenemos, cómo nos comportamos en esos primeros instantes de cada interacción. Los ojos son el receptor de la zona intelectual, la nariz es el receptor de nuestro cerebro emocional y la boca del instintivo.
Por poner un ejemplo práctico, el cual entiendo hasta yo mismo; nuestro marco que es el cráneo, nos indica cómo somos de base, cuáles son nuestras motivaciones profundas, internas y el motor de nuestra vida para cada uno de nosotros, así como nuestras potencialidades y también indican nuestros puntos más flacos. ES LA PISCINA QUE TENEMOS, que podría ser más grande o más pequeña, con más capacidad de volumen o menos en general o en cada una de sus zonas. Y nuestros receptores, que son los que nos unen al mundo, los que nos dan la manera de comunicarnos con el exterior, cómo recibimos o transmitimos la información. SON LOS GRIFOS DE LA PISCINA.
Podemos tener una piscina grande con mucha capacidad de agua y grifos con mucho calibre de apertura con lo que nos entrará y saldrá el agua rápidamente. Pero… que pasaría si nuestra piscina es pequeña y los grifos son grandes… o cualquiera de las combinaciones que se te puedan ocurrir entre el tamaño de la piscina y el tamaño de los grifos, cómo será la persona, cómo se comunicará…
Sus ojos son pequeños y a menudo están cerrados, cerrados al mundo, a otras opiniones distintas a la suya, él es una persona poco influenciable a nivel de ideas, o sea de ideas muy propias, solo recoge una pequeña parte de la información del mundo a través de sus ojos, solo la que a él le interesa. Podríamos pensar que todo el mundo hace lo mismo, ¿verdad?, pero hay personas que están más cerradas que otras a opiniones y a proyectos, como es el caso de Donald Trump, para él SOLO VALE LO SUYO. Unos ojos pequeños confieren a la persona poca receptividad ante la información cognitiva que pudiera recibir de otras personas o circunstancias. Los ojos de Trump son muy tónicos, esta característica le hace ser si cabe menos receptivo, poco influenciable y transmitir más información de la que recibe. Fijaros, un cazador de antaño… ¿cómo tendría los ojos… tónicos y directos o átonos y caídos? Los ojos tónicos, fijos, elevados en sus extremos son de cazador, no son receptivos ni influenciables, sino de acción. Estos ojos, también parecen como metidos ligeramente en las cuencas, o sea hacia dentro, esta característica se hace percibir la información de manera selectiva, es como si se protegiera a nivel de la información que le pudiera entrar. Una vez más vemos que No todo le vale.
La nariz es como algunos sabéis, el receptor de las emociones, a través de unos de los pares nerviosos craneales, recogemos y transmitimos la información emocional a través de la nariz, esta nos permite oler y recoger el sustrato sensitivo del mundo a la par que evocarlo. Su nariz es precisa y contundente, no pierde el tiempo en lo que sea más allá de lo estrictamente necesario y tiene capacidad de comunicar, sabe hacerlo pero tampoco se muere por ello. Aprovecho estas líneas en las que hablamos de las emociones de Trump para hacer dar una lectura de la altura de su zona emocional, no demasiado larga, sino más bien corta, lo que también le acarrea cierta impulsividad emocional. Su nariz no es muy grande, solo mantiene contacto para lo imprescindible, no pierde el tiempo en hablar de cosas poco concretas ni las que no le interesan. Sus agujeros tienden a protegerse, tiende a protegerse de las emociones que pudieran venir de fuera. Nariz que además está en avance, es directa y que le hace comunicar y no callarse a nivel emocional y comunica como decíamos antes sin perder el tiempo en remilgos, solo lo que a él le interesa.
Por otro lado, podemos observar una retracción latero-nasal ligera, y qué es esto, pues lo podemos observar en sus pómulos, en vista de perfil de Trump, debajo de sus ojos no sobresale la carne, así como en otras zonas de su rostro sí, en sus pómulos no. Esta circunstancia le confiere un carácter en sus comunicaciones más social que afectiva-emocional.
Pero quizá el elemento más impactante y característico de su cara en el ámbito de sus receptores, es la boca, una boca carnosa y en retracción lateral (hacia fuera) la cual nos hace ver que es una persona de apetitos carnales, culinarios, de poder y lucha y de apetencias materiales. Además no existe contención de estos apetitos, su cerebro en este sentido es impulsivo y le fuerza a decir y a conseguir impulsivamente lo que desea.
Podemos observar un pequeño contraste que nos revela información, este contraste es su marco grande dilatado, que nos indica potencia y reservas energéticas en contraste con sus receptores (ojos, nariz y boca) tienden a un tamaño pequeño. Aunque tenemos que comentar que su boca a pesar de no ser muy grande es carnosa y hacia fuera. Este contraste procura a una persona de gran fortaleza, él no gastar demasiadas energías en sus interacciones, pudiendo estar cargado constantemente de ella y preparado para el combate siempre.
Retrato PSICOLÓGICO a través de su rostro
Hombre con fuerza, combatividad hasta límites insospechados, de ideas muy propias y con un motor de vida muy enfocado en los temas materiales, tales con el poder, la materia, el sexo y la comida. Con menos dominio de sí mismo a nivel emocional y cognitivo que instintivo. Rápido a nivel intelectual, persona de acción y de hechos, pero actualmente más de ordenar que de hacer por sí mismo. Con una gran impulsividad y deseo carnal y material nada oprimido. Pero quizá aunque es un individuo de gran rapidez y fluidez mental, no cuenta con la capacidad global de entendimiento y la apertura necesaria al mundo y a los demás, siendo poseedor de una mente más preparada para la especialización en áreas concretas que para la globalización y la apertura y el entendimiento, mermando su capacidad para entender, como decía, más globalmente cualquier circunstancia.
Toda esta información la hemos podido obtener gracias a la comunicación no verbal y al análisis de los diferentes gestos y facciones de su rostro.